DOMINGO Ť 14 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Dificulta migración preparar elecciones, dicen expertos

Zonas indígenas, donde hay más interés por ayudar en organización de comicios

ALONSO URRUTIA ENVIADO

Colima, Col., 13 de octubre. La participación de las comunidades indígenas en la organización de los procesos electorales federales se encuentra por arriba de la media nacional, aun cuando el Instituto Federal Electoral (IFE) ha detectado que en estas regiones la migración, la dispersión demográfica, el analfabetismo y el monolingüismo son dificultades que hacen más complejo el desarrollo de los comicios, sostuvo el consejero electoral Jesús Cantú al participar en el coloquio Formas de voto, prácticas de las asambleas y toma de decisiones.

En el último día del coloquio, organizado por la Universidad de Colima y el Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social, Marlene Romo, de la Dirección de Capacitación y Educación Cívica del IFE, reconoció que la dificultad para organizar los comicios choca con las tradiciones comunitarias de los pueblos indígenas.

A su vez, Raúl Trujillo, vocal ejecutivo del IFE en Chihuahua, se refirió a la complejidad de realizar elecciones federales en municipios -como Guadalupe-Hidalgo- que tienen mil 115 comunidades indígenas dispersas. A ello, dijo, se añaden otras dificultades: en los últimos comicios se dejaron de instalar casillas porque no se cubría el requisito legal de que al menos cuatro personas del padrón supieran hablar y escribir en español para hacerse cargo de la casilla.

Cantú señaló que el diseño de la estructura y funcionamiento del Instituto Federal Electoral no obedeció a un plan preconcebido, sino que fue resultado de la desconfianza de los partidos políticos hacia los comicios.

Sin embargo, añadió, eso desató un círculo virtuoso, pues se buscó la participación ciudadana en la organización de los comicios, con lo cual el IFE es el único organismo en el que realmente existe una participación civil. "Si esto se pudiera trasladar a otros ámbitos, sería un importante avance para el país en su conjunto", expresó.

Respecto de los pueblos indios mencionó que el padrón electoral tiene 6.2 millones de ciudadanos de diversos grupos étnicos y hay 36 distritos electorales con 2 mil 239 secciones.

Apuntó que en el diagnóstico elaborado sobre la problemática para la organización electoral en las zonas indígenas, se detectó que en 40 por ciento de los casos las dificultades para reclutar ciudadanos obedecieron a la intensa migración en esas regiones y 32 por ciento por reticencia o apatía. Además, por dispersión geográfica, monolingüismo y analfabetismo.

Romo admitió que el Instituto Federal Electoral no ha impulsado estrategias para facilitar la organización de los comicios en zonas indígenas. "No quiero omitir que aunque los sistemas de usos y costumbres sólo están reconocidos a nivel estatal, es posible que las elecciones federales estén afectadas por tradiciones comunitarias."

Paradójicamente, también se puede afirmar que la garantía constitucional del voto libre y secreto "ha resultado una práctica eficaz que han defendido e implementado algunas comunidades contra los cacicazgos locales, que son aún inexpugnables trincheras del autoritarismo. En ocasiones estas leyes occidentales ayudan a las comunidades a ganar pequeñas batallas", destacó.

A su vez, el vocal del IFE en Oaxaca, Librado Caballero, dijo que la organización de los comicios federales implica, en ocasiones, negociar con las autoridades tradicionales, a fin de permitir la instalación de urnas y el desarrollo de las elecciones.

Aun así, acotó, en algunos casos finalmente no dan el permiso y hay casillas con cero votos. Las autoridades no dan la autorización a la comunidad de participar. Esto refleja un "choque de culturas" que dificulta el desarrollo de elecciones en esas comunidades, apuntó.

Finalmente reconoció que en muchos casos el dinero que se les paga a los funcionarios de casilla -por concepto de alimentación el día de los comicios- es un factor que allana los obstáculos, en virtud de la extrema pobreza que existe. "A veces los 150 pesos que se les paga para la alimentación de un día les sirve para alimentar a su familia una semana."