Ť López Obrador y Saltiel entregan cheques a adscritos al programa de sustitución

Retirarán concesión a microbuseros que no cambien unidades

RAUL LLANOS Y LAURA GOMEZ

Al poner en marcha el programa de sustitución de microbuses por autobuses, el mandatario de esta ciudad, Andrés Manuel López Obrador, sostuvo que a aquellos operadores que no cambien sus unidades pese al apoyo que les está brindando el gobierno local, simple y sencillamente se les retirará la concesión. De hecho, quienes tengan ya sus nuevos autobuses tienen desde hoy la autorización de incrementar su tarifa de 2 a 3 pesos.

"El que tenga una unidad del año 88, 89 o 90, a partir del primero de enero del 2002 no va a poder circular en la ciudad. Son reglas muy claras, por eso se abre esta posibilidad, este programa", añadió el Ejecutivo local, quien destacó que para este año hay un presupuesto de 80 millones para esa conversión, pero si se requiere se aprobarán más recursos.

Durante el acto, celebrado en el Zócalo capitalino, el jefe de Gobierno expresó que quienes no acaten esta decisión "no vamos a usar a la primera la fuerza, la autoridad, siempre va a ser el convencimiento lo primero, ya hasta el último recurso vamos a hacer valer la autoridad, pero en este caso vamos muy bien, hay acuerdos y siempre va a estar la mano tendida, la mano franca del gobierno para apoyar a las mujeres y a los hombres que trabajan en esta ciudad".

A su vez, Jenny Saltiel, secretaria de Transporte, dijo que las unidades que se vayan sustituyendo se destruirán como chatarra para evitar que circulen clandestinamente en otras entidades. Dijo que junto con ese cambio de autobuses por microbuses se pondrá en marcha un programa de capacitación para operadores, pues esto no debe seguir siendo "una simulación, ni limitarse a un examen de manejo, sino incluir un cambio de actitud hacia una verdadera vocación de servicio en el trato con usuarios". Comentó que en este programa podrían incluirse los taxis.

El director general de Transporte, Pablo Enríquez Maldonado, explicó que la capacitación que se brindará a los operadores incluirá temas como relaciones humanas, primeros auxilios, educación vial, legislación del transporte, manejo preventivo y cultura mecánica.

Por su parte, líderes de diversas rutas de pasajeros consideraron que el programa para la sustitución de 2 mil 700 microbuses con 12 años en circulación provocará que sus propietarios caigan en cartera vencida y pierdan su patrimonio, ante las condiciones "leoninas" de los financiamientos ofrecidos por las armadoras, a 60 meses y tasas de interés de 35 por ciento anual en promedio.

Para Eleazar Amador, Guillermo Tagle y Miguel Angel Orozco, dirigentes de las rutas 73, 12 y 25, respectivamente, hasta el momento "no existe un apoyo real al sector, pues los 105 mil pesos que entregan autoridades son a cambio de la unidad actual, muchas de las cuales están en buenas condiciones; además se impulsa una competencia desleal con la introducción de autobuses de la RTP, y no hay avances reales en materia de tarifas".

A tres años de distancia, los concesionarios del servicio público de transporte colectivo recibirán en diciembre cuando mucho un incremento de 50 centavos, insuficiente para cubrir el alza de combustible y refacciones; aunque las autoridades buscan evitar una "reacción violenta", pues en las mesas de negociación "se nos ha dicho que el aumento no será mayor a 20.05 por ciento, por las condiciones económicas prevalecientes".

Por ello los mencionados líderes exigieron el retiro inmediato de las unidades de la Red de Transporte de Pasajeros que circulan en corredores donde dan servicio, pues la diferencia de tarifas provocará que la gente no utilice microbuses y se nulifique su rentabilidad.

Los concesionarios no pueden pagar letras mensuales de 18 mil pesos y mantener una fuente de trabajo para casi 50 mil familias, por lo que muchos quedarán desempleados, sin alternativa laboral por parte de las autoridades, quienes se negaron a aceptar la incursión de un parque vehicular mixto en las delegaciones Iztapalapa, Tláhuac o Xochimilco, dijeron.