MIERCOLES Ť Ť JULIO Ť 2001

Ť Garantizar su proceso en España, el objetivo: juez Garzón

Ordenan ingreso a prisión de ex militar represor argentino

Ť Confesó en 1997 su participación en vuelos de la muerte

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 31 de julio. El juez de la Audiencia Nacional de España, Baltasar Garzón, ordenó hoy el ingreso a prisión incondicional del ex capitán y represor argentino Adolfo Scilingo, quien se encuentra en el país desde 1995, cuando decidió confesar al magistrado su participación activa en los denominados vuelos de la muerte durante la dictadura militar que gobernó a Argentina, de 1976 a 1983.

Garzón explicó que debió ordenar la prisión del acusado, para para evitar su fuga y garantizar que se sujete al proceso penal al que está sometido en España.

Scilingo, conocido como el represor arrepentido por su declaración judicial en la que confirmó su participación en el asesinato de al menos 30 personas, está procesado por los delitos de genocidio y terrorismo en el mismo sumario abierto contra los máximos dirigentes de las Juntas Militares, que llenaron el país de cientos de centros clandestinos de detención, tortura y exterminio.

En 1997, Scilingo confesó ante Garzón su participación, en junio y agosto de 1977, en dos vuelos de la muerte, sistema mediante el cual las dictaduras del Cono Sur arrojaban al mar desde aviones a los opositores al régimen militar, todavía con vida y sedados.

Scilingo, que desde 1999 pasó dos años en la cárcel madrileña de Carabanchel antes de que se le otorgara la libertad vigilada, se convirtió en el primer militar argentino que manifestó abiertamente su arrepentimiento y confesó su culpa, si bien el año pasado y ante el cariz que tomaba el proceso judicial, se retractó de lo antes declarado y exigió su inmediato regreso a Argentina, donde todavía esta vigente la Ley de Obediencia Debida.

La decisión judicial de Garzón de hoy partió de un auto del Tribunal Constitucional, que en respuesta a un recurso de amparo presentado por el ex capitán de la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA), resolvió que la situación de Scilingo -a quien se le había confiscado el pasaporte y tenía prohibido abandonar el país- no está considerada en la ley procesal y exigió que se le modifique su situación actual.

Garzón tenía dos opciones: declarar la libertad condicional y entregar los documentos migratorios, o declarar el ingreso en prisión, pero tras escuchar los alegatos de la defensa del represor y de los abogados de la acusación popular, el magistrado consideró oportuno declarar prisión provisional e incondicional, dado que "hay riesgo de fuga".

Para los abogados que representan a las nueve organizaciones que forman la acusación popular en el proceso, dictar la prisión a Scilingo es la única salvaguarda que permitirá garantizar la presencia del procesado en el juicio, que deberá celebrarse próximamente sobre los hechos en los que Scilingo está implicado.

A su vez, la defensa del acusado presentó un texto en el que pidió que no se aplique la sentencia del Tribunal Constitucional y que se permita que su defendido permanezca en libertad vigilada, una posibilidad que choca frontalmente con los ordenamientos judiciales que tienen como máxima autoridad al propio Constitucional.

De otro caso en Roma, el fiscal italiano Francesco Caporale aseguró hoy que juzgará al ex represor argentino Alfredo Astiz, "con él o sin él presente" en el país, tras el pedido de oficial de extradición hecho lunes por Italia a la Cancillería argentina.

"Paradójicamente, si no aceptan extraditarlo, como temo, será más fácil juzgarlo en Italia, ya que no se puede justificar su ausencia, y se puede iniciar sin trabas el proceso en contumacia, en rebeldía", afirmó el fiscal Caporale, quien el 27 de junio pidió la detención de Astiz por la desaparición de tres italianos durante al dictadura argentina.