MARTES Ť 20 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Se prevé que entre en funcionamiento dentro de unos seis años: Soberón Acevedo

El centro de medicina genómica costará casi 100 mdd

CAROLINA GOMEZ MENA

Puesto que México no puede marginarse de las investigaciones sobre el genoma humano ni del desarrollo de la medicina genómica, a mediados de este año quedarán concluidos estudios de factibilidad que permitirán instalar el centro de medicina genómica, informó el doctor Guillermo Soberón Acevedo, secretario de la Comisión Nacional para el Genoma Humano.

En conferencia de prensa ofrecida minutos después de la primera reunión de dicha comisión, presidida por Julio Frenk Mora, secretario de Salud, Soberón Acevedo puntualizó que la creación del centro de medicina genómica costará aproximadamente 100 millones de dólares, y que se prevé que soberon_jimenez1 entre en funciones dentro de seis años más.

Al destacar que se invertirán cuatro millones de pesos en el estudio multidisciplinario de factibilidad que lleva a cabo la Comisión Nacional para el Genoma Humano, en conjunto con Ssa, UNAM, Conacyt y Fundación Mexicana para la Salud, expuso que pese a que los escasos recursos fiscales, el gobierno no debe escatimar aportaciones al proyecto, pues aunque la inversión es alta, más caro saldrá a México no adentrarse en esta nueva tecnología.

Aseveró que dicho estudio demostrará que desarrollar la medicina genómica en el país será una prioridad, ya que en menos de un lustro la aplicación de la ciencia médica internacional se revolucionará, luego de que el 12 de febrero pasado fuera publicado en la revista Nature el primer borrador del genoma humano, fruto de poco más de 11 años de arduas investigaciones.

Asimismo, advirtió que si "México no se sube ahora al tren" y no desarrolla su propia medicina genómica basada en el estudio del genoma de la población nacional, la tarea podrían emprenderla otras naciones, lo cual haría al país vulnerable y dependiente, esta vez en el terreno genético.

Explicó que si se permite a otros países estudiar el genoma de la población mexicana, ello dejaría a México en la indefensión por el poder estratégico que implicaría que una potencia conozca el mapa genético de los nacionales, pues ello revelaría aspectos vulnerables de nuestra información genética.

El investigador mexicano Gerardo Jiménez Sánchez, miembro del equipo del Centro de Medicina Genética de la Universidad John Hopkins y del de planeación del centro de medicina genómica nacional, apuntó que en los poco más de seis años que tardará su construcción, que incluirá planificación y levantamiento de la sede y su equipamiento, comenzará la preparación de los recursos humanos que requerirá la empresa.

Añadió que se deberán renovar programas en facultades de medicina, química y biología de universidades nacionales, y entrenar a jóvenes en el extranjero en áreas específicas de la nueva medicina genómica.

Sostuvo que aunque con la publicación de la primera parte del genoma humano "se da el banderazo de salida a la nueva era genómica" para todas las naciones, el no haber participado en estas investigaciones pone al país en cierta desventaja, que podría agigantarse si desconoce este descubrimiento y sigue aplicando la medicina tradicional, que en poco tiempo será obsoleta.

Puesto que el desarrollo de esta tecnología involucra aspectos éticos, sociales, médicos y legales, la comisión que desarrolla el estudio de factibilidad es integral.