MARTES Ť 20 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Crece el deterioro ambiental
Deben ser compatibles desarrollo sustentable y económico: PNUMA
ANGELICA ENCISO
De no equilibrarse el desarrollo sustentable y el crecimiento económico, no será posible alcanzar la estabilidad en América Latina, ni resolver el problema de la pobreza, porque cada vez se ahonda más el deterioro ambiental, según Ricardo Sánchez, director del Programa de Naciones para el Medio Ambiente (PNUMA) en América Latina y el Caribe.
La Conferencia Internacional sobre Comercio, Ambiente y Desarrollo Sustentable, a la que estaba programada la asistencia del titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Víctor Lichtinger --quien no se presentó-- fue inaugurada por el rector Juan Ramón de la Fuente, quien dijo que ni el PNUMA ni las organizaciones no gubernamentales están satisfechas con la respuesta que se ha dado para hacer compatibles el desarrollo sustentable y el económico.
Agregó que existe la percepción social de que no se ha encontrado en la práctica la forma de equilibrar esos dos aspectos.
En el marco de esta reunión, Ricardo Sánchez abundó en entrevista en que de no lograrse este equilibrio no se podrá alcanzar una estabilidad que permita resolver el problema de la pobreza y que se reviertan los procesos de degradación ambiental, "por lo tanto no habrá una concertación de esos recursos tan importantes que tiene la región, y que son las personas, los recursos naturales, la biodiversidad, el aguas y los suelos".
Dijo que la situación no es buena porque ha habido crecimiento de la pobreza y también de la desigualdad, "cada vez las diferencias de ingresos en el sector más calificado y más rico de la sociedad en relación con los más pobres es mayor". A la vez, añadió, continúan los procesos y tendencias de degradación del medio ambiente.
Mencionó como ejemplo que la situación de las zonas marino costeras no es buena; que los recursos pesqueros de las principales regiones de la región están al límite de sus posibilidades y debe aumentar el ritmo de crecimiento económico, tanto en empleo como en fondos para el desarrollo social, educación, salud y recursos naturales.
Destacó que el problema más severo de la región es la pobreza y la desigualdad, aspecto que además presiona los recursos naturales.
Los gobiernos en la región buscan incorporar la dimensión ambiental en los procesos de desarrollo económico y están decididos a encontrar ese camino hacia la sustentabilidad, lo cual requiere de la construcción de consensos y una mayor participación de los sectores de la sociedad.
Recordó que hace nueve años, en la Cumbre de Río, de donde surgió la Agenda 21, se habló de la necesidad de cumplir con los convenios, transformar los patrones de consumo, establecer transferencia tecnológica diferenciada en cada nación. Todo eso, dijo, aún "está en ciernes", falta avanzar.
En el compromiso de reducir los gases de invernadero, los países subdesarrollados no han dicho cómo lo van a hacer.
"A casi diez años no se han dado avances suficientes, se deben buscar soluciones e instrumentarlas; ha habido desarrollo en la institucionalización ambiental de los gobiernos, hay sensibilización de la sociedad; pero el tiempo se nos acorta".