Lunes en la Ciencia, 3 de abril del 2000
Eugenio Ley Koo
Construcción de modelos para describir la naturaleza
El eslabón de una cadena, que a través del tiempo sostiene a más partes de la misma, es la posición de Eugenio Ley Koo (México, DF, 1939), que con su trabajo de investigador en el área de física y su "responsabilidad" por compartir lo aprendido, se ha ganado -entre los que lo rodean y conocen- la fama de ser "un gran profesor".
Y es que, apenas terminó sus estudios en física en la Universidad Autónoma de Puebla, Ley Koo empezó a dar cursos generales de matemáticas y física a profesionistas de diversas áreas, al igual que clases sobre la estructura atómica y nuclear y las propiedades de las sustancias radiactivas, entre otras materias necesarias para los cursos de entrenamiento en técnicas nucleares, impartidos por lo que entonces era la Comisión Nacional de Energía Nuclear, donde el investigador trabajó por primera vez.
Posteriormente, después de haber obtenido una
maestría y un doctorado en física, en la Universidad de
Indiana en Estados Unidos, donde Ley Koo trabajó con
radioisótopos y decaimiento beta, el investigador se
dedicó al área de física nuclear y física
atómica molecular. Sus primeros trabajos, hechos en
colaboración con Virgilio Beltrán, fueron sobre
magnetismo atómico.
"Ahora estudio, junto con mis alumnos, modelos matemáticos de átomos y moléculas confinadas. Para entender esto se debe saber que las propiedades atómicas se estudian generalmente en estado gaseoso, porque de esa manera es posible el estudio de las propiedades intrínsecas de los átomos, pero si éstos están en un medio diferente, por ejemplo, atrapados dentro de un cristal, entonces sus propiedades se ven modificadas apreciablemente, por lo cual nos interesa su estudio."
Así, la investigación sobre lo más pequeño parece ser la pista para entender lo más grande. En ese sentido, Eugenio Ley y los doctores Carlos Bunge y Rocío Jáuregui han investigado durante los últimos años sobre lo que hoy se conoce como cálculos atómicos relativistas.
"Conforme se ha avanzado en el conocimiento de la física, hemos podido saber que en el estudio de la estructura de la materia, a escala atómica y subatómica, hay reglas diferentes de las que aplican para describir el movimiento, por ejemplo del Sol o los planetas; es decir, diferentes a las establecidas por la física clásica. Así que se desarrolló una nueva mecánica llamada cuántica, en la que uno de los elementos principales es reconocer que el electrón, aunque tiene propiedades de partícula, como masa y carga eléctrica, también tiene propiedades ondulatorias."
De manera simple, se puede decir que la física cuántica ha sido utilizada para medir y saber cómo se comportan las partículas atómicas, y la física relativista para estudiar movimientos a altas velocidades.
Ley Koo explica que los efectos relativistas se manifiestan cuando las velocidades involucradas son comparables a la velocidad de la luz (300 mil kilómetros por segundo). "En el átomo de hidrógeno, que es el más simple, el electrón se mueve a 1/137 veces la velocidad de la luz. En átomos más pesados, las velocidades pueden ser mayores y es indispensable incorporar los efectos relativistas en sus estudios".
Muchos de los cálculos atómicos relativistas se basan en los llamados métodos perturbativos. En contraste, los cálculos del grupo de Ley Koo se han basado en un enfoque variacional con resultados novedosos, tales como formular un teorema y un principio.
"Esto nos ha permitido entender cálculos realizados durante las dos décadas anteriores y que han funcionado, pero que la gente no ha entendido por qué", apunta el investigador.
Ley Koo, quien ha sido director de la Facultad de Ciencias de la UNAM, profesor en diversas universidades del mundo y recientemente autor del libro El electrón centenario, de la colección La Ciencia para Todos, señala que en la naturaleza hay una gran diversidad de fenómenos, y uno de los propósitos de la ciencia es precisamente reconocer que dentro de esa diversidad hay ciertas regularidades y principios que nos pueden ayudar a entenderla.
"El propósito de la física teórica es construir modelos que describan apropiadamente los fenómenos naturales." (Mirna Servín) (Fotos: María Luisa Severiano)