Ť Monitorearán ONG las acciones del organismo


Ignora la OMC las peticiones de propiciar un comercio justo

Ť Esa organización se deslegitima al hacer de lado a la sociedad civil

Jim Cason y David Brooks, enviados, Seattle, 3 de diciembre Ť Organizaciones sociales que representan a consumidores, pequeños granjeros, ambientalistas y defensores de los derechos humanos denunciaron hoy que la Organización Mundial de Comercio (OMC) ignoró sus demandas a favor del "comercio justo" para promover el desarrollo sostenible, después de días de cabildeo de cientos de ONG que acudieron a esta ciudad.

Mientras en las calles continuaron las manifestaciones contra la OMC por cuarto día consecutivo, seis pisos arriba representantes de unas mil ONG compitieron intensamente con cientos de representantes empresariales para influir en las decisiones de los delegados de 135 países en el encuentro ministerial de la organización mundial.

En un frente de oposición menos visible que el manifestado en las calles, decenas de organizaciones ambientales, de defensa al consumidor, de granjeros y sindicatos cabildearon para incorporar demandas y defender una amplia gama de intereses sociales. Al parecer, fracasaron.

"Si uno lee el texto de la declaración ministerial, es como si no existiéramos... Pero el ignorar a la sociedad civil sólo llevará a deslegitimizar a la OMC", opinó Mark Ritchie del Instituto para Políticas de Agricultura y Comercio. "No estamos consiguiendo nada", afirmó Andrea Durbin de Amigos de la Tierra. En entrevista con La Jornada, Ritchie señaló que las protestas en las calles son importantes, pero "la OMC estará aquí mañana", por lo que se necesita una presencia continua y presión de las ONG para investigar, monitorear y difundir lo que ocurre en las negociaciones comerciales y así promover un amplio debate público. Para Durbin la estrategia es primero defensiva, para evitar que la OMC obtenga el derecho de revertir leyes y normas ambientales nacionales en diversos países, así como promover condicionantes ambientales para el comercio de ciertos productos y procesos.

ƑPero qué se logró?

Ritchie comentó que aunque las ONG no lograron cambiar las políticas, de Seattle salen las organizaciones civiles con una "nueva unidad" a nivel internacional. "Hemos creado un concepto de que existe la sociedad civil global y que está sentada en esta mesa", dijo y señaló que de aquí en adelante este nuevo actor estará presente. "Aquí se están construyendo alianzas para que diversos sectores sociales puedan actuar globalmente", afirmó Durbin.

Aquí están representadas las grandes organizaciones ambientales, varias de granjeros, Public Citizen y otras ONG de defensa del consumidor. Durante esta semana, han realizado decenas de foros, se han dedicado a monitorear cada paso de las negociaciones de la OMC, han presionado a diversas delegaciones, han tratado de promover sus mensajes entre los más de 3 mil reporteros de todo el mundo reunidos aquí. Algunos formaron parte de las delegaciones oficiales de sus países, pero sin poder de decisión, dijeron.

Hoy, en la sala de prensa de la OMC realizaron una acción en la que miembros de Amigos de la Tierra y de la Red de Acción para las Selvas irrumpieron con una manta y denunciaron, antes de ser expulsados del edificio, los acuerdos de la OMC que llevarían a la destrucción de bosques.

Las ONG presentes aquí son de diversas partes del mundo. Hay representantes de ONG en Africa, Asia y América Latina, como la Red del Tercer Mundo, 40 delegados de 20 países de Amigos de la Tierra, así como varios representantes latinoamericanos de la red de organizaciones rurales Vía Campesina, entre otros.

El mundo de las ONG no necesariamente llegó con consensos entre ellos, ni compartiendo las mismas estrategias en torno a la OMC. Algunos llegaron a defender lo que existe (como normas de protección del consumidor y leyes ambientales nacionales), otros para demandar la incorporación de ciertas cosas (como derechos laborales o condicionantes ecológicas), y otras más para intentar descarrilar el proceso desde adentro y desde las calles, o una combinación de éstas. Además, hay las diferencias de opinión entre las ONG del primer mundo y sus contrapartes en el tercer mundo.

La Red del Tercer Mundo, por ejemplo, rechazó las propuestas para incorporar derechos laborales o condiciones ecológicas en la OMC. "Deseamos mejorar los derechos laborales y proteger el medio ambiente en nuestros países, pero la realidad es que el equilibrio de poder en la OMC es tal que estas cláusulas sociales serán utilizadas para privilegiar los bienes de los países desarrollados contra los intereses de los países en desarrollo", explicó el vocero de la Red Martin Khor.

Agregó que a su organización le gustaría poner la atención en los asuntos agrarios que son de importancia para el Tercer Mundo y los problemas de la deuda externa de estos países.

Pero al final de esta semana, señalaron unos, la falta de atención y rechazo de casi todas las demandas ambientales, de protección social y de apoyo a los pequeños granjeros, entre otras, ha tenido el efecto de consolidar la diversidad de opinión entre las ONG críticas de la OMC.

La demanda general de todas estas agrupaciones es la incorporación de las voces sociales en un foro que perciben como exclusivo para los intereses empresariales transnacionales y los gobiernos. En esencia, se está hablando de cómo "democratizar" las instituciones y el propio proceso de integración económico conocido como "globalización".

La OMC estará aquí mañana, advierte Ritchie. Pero después de Seattle ya nunca será la misma institución, ni el mismo debate sobre las políticas comerciales internacionales, señalan los diversos representantes de las ONG.

Las ONG anunciaron que se han comprometido a establecer un monitoreo permanente de la OMC, de multiplicar la presencia de las ONG en la próxima reunión ministerial e intensificar la promoción de un régimen internacional de reglas y normas para condicionar el comportamiento de las empresas transnacionales, informó Ritchie.