Ť Charla con el Nobel, autor del prólogo de Don Durito de la Lacandona
Marcos es una excepción en el mundo de la política y en la intervención social: Saramago
Ť Sorprendente, que además de la responsabilidad que lleva a cuestas, se siente a escribir, dice
Ť Por qué no inventé yo un escarabajo que fuma, es algo que me da envidia, señala el escritor
Javier Molina, especial para La Jornada/ I, San Cristóbal de Las Casas, Chis., 3 de diciembre Ť Creo yo que Marcos, en el mundo de la política y en la intervención cívica y social es, en todo, una excepción. Esto afirma José Saramago, cuando le preguntamos a propósito de Marcos, el escritor. ''Claro, casi siempre ocurre que los políticos tienen asesores, secretarios que escriben los textos, los discursos, las intervenciones, los comentarios y no hacen más que llegar al micrófono y leerlos. En el caso de Marcos, además de llevar sobre su espalda la responsabilidad política que todos conocemos hace algo que, en mi opinión, debería ocuparle todo el tiempo. Es decir, lo que hace como escritor es de tal forma inmenso, diverso, que me sorprende cómo es capaz de que en circunstancias que no son las más propicias, con la responsabilidad política que tiene, además se sienta a escribir. Y escribe un comunicado, muy bien, una declaración. Pero más, mucho más que eso, yo digo más importante que eso, se enfrenta con la escritura, literaria y política".
La plática es aquí, en una noche fría de esta Ciudad Real, motivada un poco por el prólogo que escribió Saramago al libro Don Durito de la Lacandona, del subcomandante Marcos, editado por el Centro de Información y Análisis de Chiapas.
''Es la simbiosis, en mi opinión, lo que ocurre aquí con Don Durito..., la simbiosis entre un saber literario y una responsabilidad política, un pensamiento político y un pensamiento literario. La idea de inventarse un escarabajo y sobre todo con el humor con que Marcos lo hace. Mire, soy Nobel de Literatura, pero me ha dado envidia, lo declaro así con esta rotundidad. ƑPor qué no lo inventé yo? No, hablando en serio, considero que es un libro importantísimo, me sentí intimidado a la hora de escribir el prólogo, no sé si esto ha sido entendido o no, pero lo que quiero decir es que hacer un prólogo para una obra literaria, bueno, yo respondo. Hacer un prólogo para una obra de pensamiento político y todo eso no ocurrió nunca, pero podría ocurrir y entonces serían dos campos distintos: esto es literatura y esto es política. Yo me sentí intimidado, cómo lo hago, cómo es que voy a escribir de un libro que es complejo, porque además de la narrativa picaresca que tiene... y no es pura casualidad que aquí se reinventa un Quijote, un Quijote en la Lacandona, y esto de convertir a Marcos en un escudero de Durito... si esto no se entiende como una muestra de humor, que no es el humor simple, no, es todo lo que resulta después de esta situación en que Marcos, autor de un pensamiento político muy claro, se convierte en escudero y discípulo de don Durito, que todo el tiempo le está dando la lección en todo, en estrategia militar o en estrategia política. En mi opinión muy sincera (y aquí no tiene nada qué ver la simpatía que tengo por Marcos, la persona civil y política, no tiene nada que ver con sus ideas, con lo que está haciendo.
La tentación de encasillar todo
''Estoy diciendo, no me importa ahora saber quién es Marcos, me importa que estoy hablando de un libro, y que éste como cualquier otro libro merece todo el respeto del mundo y no puedo formular una opinión sin haberlo leído. Y la verdad es que lo leí, lo he leído. Extraordinariamente atractivo, muy bien escrito. Cómo escribiendo en la circunstancia que vive Marcos puede tener la alegría de espíritu de inventar una situación, un personaje, un Durito, un escarabajo que fuma... Además del gusto que me ha dado el poder escribir este prólogo, cuento lo que he disfrutado con una obra literaria.''
ųVemos la simbiosis del político y el escritor, pero también a un conocedor de la música de rock, de Shakespeare, de canciones rancheras, de Marx. ƑCómo considera a una cultura que abarca tantos campos?
ųEs que en el caso de Marcos la cultura no es una palabra vana, y cuando digo que no es una palabra vana significa que no está centrada en un único campo cultural, sino al contrario, digamos se expande, pero no sólo en los géneros o aspectos culturales muy distintos de la actualidad: se expande en el tiempo. Marcos es un hombre con una formación clásica, es una persona que ha leído mucho, instruida, y que logra algo que no se encuentra mucho hoy, que siendo como es, conocedor de la cultura de su tiempo, es igual conocedor de la cultura histórica, literaria, filosófica, es decir puede mirar al día de hoy con igual intensidad con que mira al día de ayer; como Platón, es un ejemplo de un político que ya no hay, que ya no existe. Con una formación de humanista como la que tiene él yo no encuentro a nadie.
ųTal vez por eso es difícil encasillar al libro en un ensayo, un cuento, una novela, una fábula.
ųSí, pero no vale la pena preocuparnos por ello. Además yo digo que una de las cosas que más nos complica la vida es encasillarlo todo, porque encasillar las cosas es una tentación, porque si puedes encasillarlo todo lo resuelves mucho más fácil, porque como está encasillada tú la necesitas, abres aquí el cajón y ahí la tienes. Ahora, un libro de él es como si le estuvieras dando una vuelta completa a la vida, entonces no tiene por qué ser encasillado, porque lo es todo, es narrativa épica, es narrativa picaresca, es análisis político, es polémica, es todo esto.
''Yo no tengo talentos adivinatorios, pero creo que este libro va a quedar en la historia de la literatura en México.''