Ofrece Gertz Manero ciudadanizar la corporación sin desatender sus fines

Ricardo Olayo Ť El nuevo secretario de Seguridad Pública, Alejandro Gertz Manero, ofreció respeto y apoyo ``a la figura del policía mal pagado, explotado y extorsionado por sus jefes y por los jefes de sus jefes'', y aseguró que debe existir una nueva convivencia de los uniformados con el ciudadano común para rescatar a la ciudad de los delincuentes.

Convocó a los policías a cumplir con su trabajo mediante ``un acto de colaboración y de solidaridad social'' hacia la defensa de los ciudadanos y anunció que iniciará en breve una readscripción de los policías al pasar su mando operativo a las delegaciones políticas.

Gertz sustituye al teniente coronel retirado del Ejército, Rodolfo Debernardi, quien se dijo satisfecho de su labor al lograr disminuir el índice delictivo y aseveró que su relevo fue parte de una estrategia, pues se hará cargo de lo que será coordinación de Protección Civil, instancia que en breve será creada por el jefe de gobierno, Cuauhtémoc Cárdenas.

Ayer Debernardi y Gertz acudieron al mediodía al salón Independencia del edificio de la ex regencia, donde la secretaria de gobierno, Rosario Robles, anunció los cambios que, explicó, no responden a presiones porque el gobierno local ejerce su mandato soberano en favor de los ciudadanos.

Robles subrayó que se heredó en la SSP ``una carga de corrupción e ineficiencia de años'' y destacó la labor del ex secretario, pues no se han detenido los planes para convocar a los ciudadanos a participar.

El recién nombrado titular de Seguridad Pública aseveró, en tanto, que su función será ``fundamentalmente la de un representante de la sociedad civil'' y adelantó que su programa de trabajo puede denominarse la ``ciudadanización de la policía preventiva'', lo que no significa que el gobierno desatienda su responsabilidad de garantizar la seguridad de las personas.

En su primer discurso como funcionario, el que fuera rector de la Universidad de las Américas desde 1995 hizo múltiples compromisos, entre los que destacan: crear un frente ciudadano, incrementar ``sustancialmente'' las percepciones de los policías ``como nunca las han tenido'', vía los estímulos para quienes den resultados; solicitar la participación de ONG y ciudadanos para instaurar un sistema confiable de denuncias, equipar ``de inmediato'' a los efectivos, mejorar la elaboración de los partes informativos de los uniformados cuando se realicen detenciones y hacer públicas las hojas de servicio de los mandos y sus subalternos, y realizar auditorías.

Hasta hoy el problema de la inseguridad no ha encontrado una salida razonable, destacó Gertz Manero al convocar a la creación de un frente ciudadano que permita fijar las bases mínimas de convivencia en la ciudad.

Dijo que en diciembre habrá un nuevo foro de discusión sobre el tema, en coordinación con ONG y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para tener un diagnóstico ``transparente e independiente'' sobre las cifras de la delincuencia y en general sobre el sistema de prevención y administración de justicia.

En abril pasado, Gertz tomó posesión como presidente del Consejo Consultivo en Procuración de Justicia y Seguridad Pública del gobierno del DF, cuyo primer aporte fue la identificación de las 15 colonias más peligrosas y la solicitud de realizar vigilancia y operativos especiales.

Recordó que ayudó a mediados de los años setenta a crear el Instituto Técnico de la Procuraduría General de la República y aseguró que las fuerzas policiacas pueden confiar en que tendrán ``un mando experimentado''. No despejó la duda sobre qué hará con los militares retirados que están en encargos de decisión y ofreció dar informes públicos periódicos.

Al dar respuesta a algunas preguntas, Robles dijo que el proyecto de transformación de la policía está vigente y aseguró que los reajustes son normales porque ``el cambio genera cambios''. Agregó que Gertz representa ``un cambio significativo en relación con quienes han estado al frente de la secretaría durante muchos años''. Se trata, dijo, ``de una persona que viene efectivamente de la sociedad civil'' con amplia experiencia para convocar a los diferentes sectores.

A su vez, Debernardi dijo que no se siente desplazado porque tendrá nuevas responsabilidades y mencionó que el número diario de delitos descendió a 617, luego de que al tomar el cargo la cifra se encontraba en 722.

Luego dijo que seguramente los reporteros perdieron apuestas, pues el relevo por el que preguntaban hace unos días no fue del procurador de Justicia, Samuel del Villar, sino de Debernardi.

ENTRE LA JUSTICIA Y LA CATEDRA

Una década de actividades en la historia del nuevo secretario de Seguridad Pública, Alejandro Gertz Manero, no está especificada en su curriculum, distribuido ayer por el gobierno capitalino.

Sus actividades laborales que se dan a conocer datan de 1963 a 1988, periodo después del cual sus actividades se ubican hasta los cargos que desempeña actualmente. Gertz Manero ha sido abogado de la Dirección Jurídica de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, catedrático en la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM y profesor titular en el Instituto Tecnológico de México (ITAM), así como subdirector de la Escuela de Derecho de la Universidad Anáhuac.

En materia de justicia, de 1971 a 1976 se desempeñó como agente del Ministerio Público, auxiliar del procurador general de la República, jefe de la Unidad Defensora del Patrimonio Cultural de la Nación. De 1975 a 1976 fue coordinador nacional de la campaña contra el narcotráfico en la PGR.

De 1977 a 1982 fue miembro de la comisión consultiva de asuntos laborales de la Comisión Nacional Bancaria y de Seguros. En 1986 fue Consejero Propietario de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana.

Según sus actividades actuales, se informa, Manero es también coordinador de la Comisión Legislativa de la Cámara de Comercio y socio de la International Bar Asociation.

Hasta ayer se desempeñó como coordinador del Consejo Consultivo en Procuración de Justicia y Seguridad Pública del DF y rector de la Universidad de las Américas. (Bertha Teresa Ramírez)

DEBERNARDI, NUEVE MESES EN EL OJO DEL HURACAN

Hasta el último momento, el teniente coronel Rodolfo Debernardi rehuyó a la prensa. Ayer, tras su renuncia, sólo por aire pudo escapar de la sede de la Secretaría de Seguridad Pública, la cual mantuvo un excesivo control de la entrada de los medios de comunicación.

Confrontado con diversos miembros de la policía capitalina y con una colección de errores legales --que le provocó incluso que una juez de distrito le girara una orden de arresto por no haber presentado a dos policías que le fueron requeridos--, el funcionario abandonó ayer el despacho que ocupó durante nueve meses.

Desde el principio de su gestión, Debernardi enfrentó una avalancha de críticas por la inclusión de militares en el equipo de mandos altos de la SSP, por su relación con Javier Coello Trejo, así como por la inclusión de la llamada ``Hermandad'' en su equipo.

El 28 de diciembre declaró a La Jornada que su expediente estaba limpio: ``Hay mala intensión en quienes pretenden ligarme (con Coello) sólo porque en algún momento trabajé con él, pero aquí no hay más influencia que valga que la de Cuauhtémoc Cárdenes''.

El 26 de marzo declaró en conferencia de prensa que ``no había nacido quien pudiera acabar con la delincuencia en la ciudad de México''.

El 2 de abril pretendió destituir de su cargo al jefe de bomberos Alejandro Aguilar López, pero fracasó.

El 11 de mayo se reveló que el subsecretario de la SSP, Héctor Ricardo Careaga Estrambasaguas, había formado parte del batallón Olimpia, el cual participó en la matanza de Tlatelolco en 1968.

Desde la renuncia de Careaga, Debernardi dejó acéfalo el cargo, aunque extraoficialmente las funciones de esa oficina las delegó primero en David Almada Gallardo, quien ocupó el cargo de subjefe del Estado Mayor policial. Se trataba de un militar que pronto recibió críticas por parte de la prensa, por haber enfrentado un consejo de guerra en el Ejército Mexicano debido al desvió de recursos económicos.

El 15 de junio, Debernardi fue acusado ante la PGR por Francisco Lara Kuri, ex jefe de sector en Cuajimalpa, por violación a la Ley de Amparo. En tanto que el comandante del 58 agrupamiento de la Policía Auxiliar, presentó también otra denuncia por la misma razón.