En medio de la crisis política que vive el PAN y la disputa por su dirigencia nacional, Héctor Larios, uno de los aspirantes a encabezarlo, denunció que el padrón del partido se puso al servicio de Marko Cortés, el otro aspirante, y exigió que en la elección del nuevo líder del blanquiazul piso parejo y equidad.

Marko Cortés reconoció que los nombramientos de los coordinadores parlamentarios del PAN en las cámaras no abonaron a la unidad. Incluso, como propuesta de campaña ofreció que cambiará tanto a Damián Zepeda y Juan Carlos Romero Hicks, si los diputados y senadores se lo piden, cuando gane la dirigencia nacional.

De manera abierta, Larios acusó que el padrón de militantes panistas está circulando. “Ya nos llamaron por teléfono de un call center enumerando la historia de Marko Cortés y eso acredita que él tiene el padrón y los demás no lo tenemos; me parece que eso no es parejo, espero que ahí quede, que no vuelva a haber otra irregularidad”.

¿Siguen las trampas en el interior del partido? –se le preguntó.

–No lo diría así. No sé de qué manera lo consiguió, supongo que se lo dio la propia dirigencia, pero es clarísimo que tiene el padrón. Hay muchísimos testimonios de las llamadas que hemos recibido.

Desde su perspectiva, el PAN se juega en esta elección su viabilidad hacia el futuro. Si somos así, muy honestos, derrotas hemos tenido toda la vida, pero ahora sabe muy diferente, ¿por qué?, porque perdimos el monopolio de la alternancia.

Larios advirtió que de seguir en la continuidad que tiene el partido, el PAN se convertirá en un partido irrelevante y de ahí a morir es automático.

Lo cierto es que para muchos panistas la designación de Damián Zepeda, ex dirigente nacional, como nuevo coordinador de la bancada del PAN en el Senado, se trató de un autodedazo. Con esta decisión aumentaron las críticas a los procedimientos de Acción Nacional y también la crisis que arrastra desde el proceso electoral federal.

Ya con el respaldo de nueve de los 12 gobernadores del PAN, la sombra de Héctor Larios se cierne sobre el michoacano Marko Cortés –hombre cercanísimo a Ricardo Anaya–, quien aduce contar con el respaldo de la estructura, pero no con los recursos de los mandatarios de su partido, en lo que se perfila como un choque de trenes en la disputa interna.

El senador saliente Francisco Búrquez anunció su renuncia al PAN, luego de 20 años de militancia y en el último día como legislador, acusó que este instituto político se ha convertido en un grupo cerrado donde ya no tienen incidencia, voz ni decisión los ciudadanos.